"El último beso"

Betty y Armando luego del lanzamiento

“El último beso” 


A- Hola, Betty... 

B- ¿Cómo le fue doctor? 

A- ¡Bien, muy bien Beatriz! La colección fue un completo éxito, la gente no hacía sino hablar de eso, hubo excelentes comentarios, creo que vamos a poder pagar todas nuestras deudas Beatriz, hay muchas expectativas....la gente ya estaba cerrando negocios Beatriz, creo que nos salvamos. 

B- Sí, doctor, a EcoModa le va ir muy bien. 

A- A EcoModa le va ir muy bien, no... Nos va ir muy bien, nos va ir muy bien. ¿Terminó el maquillaje ya? 

Betty le entrega el informe maquillado, Armando lo revisa y dice... 

A- A ver... Dios mío, Beatriz, Dios mío, vuelvo a sentir la vida, vuelvo a sentir mi vida...gracias, gracias Beatriz, muchas gracias. 

Armando se acerca a Beatriz y la besa

[el beso más bello de todos!]

Ella se separa y le dice... 

B- No, doctor, por favor... 

A- Beatriz, lo siento, lo siento pero no puedo evitarlo, de verdad... 

Armando la besa nuevamente y Betty vuelve a separarse de él... 

B- No, doctor, por favor, no... 

A- ¿Qué pasa, Beatriz? Yo la deseo, la deseo mucho. ¿Acaso usted no me desea? 

B- Si doctor, demasiado. 

A- ¿Entonces que esperamos? Dígame... ¿Qué esperamos? ¿Qué le pasa? 

B- Doctor, no va a pasar nada, pero por favor abráceme, déme un abrazo. 

Ambos se funden en un intenso abrazo. 

A- Beatriz, yo...yo siento este abrazo como...como eso abrazos de despedida, siento este abrazo como cuando uno va al aeropuerto y se despide de la persona a la que ama y, y que sabe que jamás la va a volver a ver. 

B- Se parece mucho, doctor...

El sonido del teléfono los interrumpe... 

A- Maldita sea, el teléfono. 

Betty y Armando se separan y ella atiende el teléfono. 

B- Presidencia. 

W- Doctora, ¿usted pidió un taxi? 

B- Sí, sí, ya bajo, gracias, Wilson. 

A- ¿Cómo así que ya baja, quién vino por usted? 

B- Un taxi que pedí doctor... 

A- ¿Un taxi? ¿Para dónde va? 

B- Para mi casa. 

A- No, no Beatriz. Yo la llevo a su casa, yo la llevo a su casa. Yo necesito estar con usted hoy. Beatriz yo quiero que vayamos a algún lugar donde podamos estar solos, yo necesito pasar la noche entera con usted. 

B- Doctor eso va a ser muy difícil para usted, lo de la junta va a estar muy duro. Además hay que llegar mañana temprano para organizar todo y usted tiene que irse mejor a su casa a descansar, a estudiar esto y mañana tiene que estar muy lúcido doctor. Por favor, vaya y estudie el balance. 

A- No, ni me lo entregue porque es que yo ya no tengo tiempo de empaparme del contenido de ese balance, Beatriz. La única persona que puede exponer ese balance mañana es usted y lo sabe. ¿Dónde está el balance real? 

B- Es este doctor, lo tengo guardado... En todo caso voy a sacarle copias al balance maquillado para meterlas en las carpetas. Bueno doctor, que pase buena noche, hasta mañana... 

Betty se retira y Armando la detiene tomándola del brazo... 

A- Usted no se puede ir sin darme un último beso... 

B- Doctor por favor, usted sabe que a mí no me gustan estas cosas en la oficina. 

A- Y usted sabe que a mí me encantan. Beatriz... Betty, escúcheme aunque sea un momento, yo...yo volví a ser feliz hoy, hace mucho tiempo que no lo era, y hoy por fin veo un poco de luz al final del túnel. Beatriz, con este balance mañana vamos a salir delante de esa maldita junta directiva, con la colección vamos a poder pagar todas nuestras deudas y estabilizar todo el sistema financiero de EcoModa... Beatriz, todo comenzó a mejorar, mejorar muchísimo. Mañana, Marcela Valencia va a salir de mi vida y el camino se va a abrir para nosotros dos...estamos a muy poco, a muy poco tiempo de lograrlo, Beatriz... 

B- Sí, claro que sí, hasta mañana... 

Armando detiene nuevamente a Betty 

A- Beatriz, dígame si me ama, ¿sí? Necesito saber si me ama, para mí es muy importante saberlo... ¿Me ama? 

B- Si doctor, yo nunca he dejado de amarlo... 

Armando se acerca y la besa y le dice... 

A- Yo la amo más que nunca, yo la amo mas que a mi vida. 

Beatriz se retira y Armando se queda en la oficina de Beatriz, él se sienta en la silla de Betty y dice... 

A- Armando Mendoza, vas a tener que aceptarlo, vas a tener que aceptar que estas enamorado por primera vez en tu vida... Y, te enamoraste de Beatriz Pinzón Solano... No sé como, Dios mío, no sé como, pero me enamore, me enamore más que nunca... 

"Antes y después de la Junta Fatídica"

Veja (e, principalmente, OUÇA ! ! ! ! )
a versão original no youtube
http://www.youtube.com/watch?v=obR0Cm7NOHo

Desfrute!!!!!
(adooooooooooroooooooo!!!!!!!)

Antes y después de la Junta Fatídica

(A-Armando, B-Betty, MC-Mario, M-Marcela, W-Wilson) Discutiendo lo del maquillaje del balance...

A- Hola, ya..¿ya esta listo ese balance, Beatriz?

B- No, doctor.

A- ¡Maldita sea, Beatriz! ¡Por qué no esta listo ese balance? Vea, son las siete de la noche, y mañana a las once de la mañana ese balance tiene que estar sobre la mesa de la junta directiva. Dígame, ¿por qué no esta listo, por qué?

MC- Ya Armando, por favor, calmémonos.

A- No me toque... Okay, mis disculpas...Yo sé que me exalte, perdóneme. Déjenos solos, Calderón.

MC- Eh..voy a...

A- Déjenos solos y cierre la puerta con seguro, no quiero que nadie nos interrumpa... A ver Beatriz, le voy a hacer una pregunta y quiero que me responda con absoluta honestidad, dígame, ¿usted no quiere maquillar ese balance, no es cierto?...Dejémonos de juegos, dejémonos de mentiras y de engaños, ¿no lo quiere hacer? ¿Ah, Beatriz? ¿No quiere maquillar ese balance, dígamelo, sí o no?

B- Nos van a descubrir, doctor.

A- ¡Otra vez con eso Beatriz, otra vez con eso! Ya le dije que no nos van a descubrir, que no hay ningún problema. Que si usted hace ese balance no nos va a pasar absolutamente nada. Ahora, si usted no tenía intenciones de maquillar ese balance no es el momento para decírmelo Betty, de verdad que no, yo..yo no creo que me merezca eso. No sé si se habrá dado cuenta, no sé si lo ha pensado por un segundo, pero mi vida y todo lo que tengo está en sus manos...mi futuro, mi credibilidad, mi honor, si es que me queda, está en sus manos. Todo lo que tengo, lo que soy y lo que amo está en sus manos. Yo jamás, en toda mi vida, había dependido de una persona tanto como dependo en este momento de usted, y menos de alguien a quien amo. Beatriz por favor, por lo que más quiera, por Dios, no me hunda... no me hunda... Yo ya no le puedo pedir que me quiera por que es apenas evidente que usted ya no siente lo mismo por mí... Pero si alguna vez sintió algo, si le queda algo de cariño por mí, si aún siente compasión por lo que yo siento por usted, si...si aprecia lo que vivimos, lo que trabajamos juntos, lo cómplices que fuimos, si algo de todo eso queda en usted, se lo ruego por Dios que me tienda la mano...que me tienda su mano, porque es lo que yo necesito en este momento Beatriz...a usted...Usted no sabe cuanto la necesito yo...

Armando abraza a Beatriz y le dice... 
A- Beatriz dígame, ¿usted me quiere ver destrozado a mí? ¿Me quiere ver vuelto pedazos? ¿Es eso lo que usted quiere?

B- No doctor, yo no quiero eso.

A- Entonces por favor no me hunda, se lo ruego, se lo ruego mucho... Betty, vea, yo sé que usted ya no siente nada por mí, pero no me hunda, porque yo a usted sí la amo.

B- Yo también lo amo doctor.

Armando besa a Beatriz, pero los interrumpe el sonido del teléfono celular de Armando.

B- Conteste doctor.

Armando contesta furioso.

A- ¡Hola!

M- Bueno, no tienes porque contestarme con tanto odio. A qué horas llegas al lanzamiento, ya deberías de estar aquí.

A- Ya voy para allá, ya voy para allá.

M- Si, no te preocupes, no lo estoy diciendo por mí, lo digo por tus papás y por los invitados.
A- Te dije que ya voy para allá...

B- Tiene que irse doctor.

A- Yo, yo no puedo irme sin saber que...que va a pasar con mi vida. ¿Cuento con usted para hacer ese balance Beatriz? Betty dígame, ¿cuento con usted para hacer ese balance?

Betty asiente y Armando la abraza y le dice...

A- Yo a usted la amo, la amo como yo jamás he amado a nadie. ¿A qué horas esta listo eso?

B- No sé, yo creo que esta noche lo tengo listo.

A- ¿No va ir al lanzamiento? Me gustaría que fuera.

B- No doctor, a mi no me gustaría ir; prefiero quedarme trabajando en esto...

A- Okay, okay… Yo la estoy llamando. Quiero que sepa una cosa, mañana después de la junta directiva, Marcela Valencia va a dejar de existir para mí, y aunque usted no lo crea va a ser nuestro día.

Armando besa a Beatriz y le dice...

A- La amo muchísimo, y muchas gracias...yo estoy llamando de verdad, ¿vale?

Armando vuelve a besar a Betty y se va de la oficina rumbo al lanzamiento.

Armando llama a Betty desde el lanzamiento...

B- Presidencia EcoModa...

A- Hola Betty, ¿cómo va?

B- Bien doctor, estoy trabajando duro es esto.

A- No me refiero a como va con el balance, me refiero a usted... ¿Cómo esta, cómo se siente?

B- Bien doctor, bien.

A- Vea, ¿usted no quiere que le lleve algo de comer? ¿Tiene hambre?

B- No, no doctor, gracias...solo quiero terminar esto.

A- ¿Y más o menos a que horas acaba? B- Yo creo que hacia las once de la noche estoy terminando.

A- Betty, me siento muy feliz, pero muy feliz, de verdad.

B- Sí doctor, en todo caso quédese tranquilo, yo voy a hacer todo lo posible por tener esta noche todo listo.

A- Yo llego como a las once de la noche, Beatriz.

B- No doctor, no es necesario.

A- Para usted no, para mí sí. 



Betty y Armando luego del lanzamiento – El último beso 


A- Hola, Betty...

B- ¿Cómo le fue doctor?

A- ¡Bien, muy bien Beatriz! La colección fue un completo éxito, la gente no hacía sino hablar de eso, hubo excelentes comentarios, creo que vamos a poder pagar todas nuestras deudas Beatriz, hay muchas expectativas....la gente ya estaba cerrando negocios Beatriz, creo que nos salvamos.

B- Sí, doctor, a EcoModa le va ir muy bien.

A- A EcoModa le va ir muy bien, no... Nos va ir muy bien, nos va ir muy bien. ¿Terminó el maquillaje ya?

Betty le entrega el informe maquillado, Armando lo revisa y dice...

A- A ver... Dios mío, Beatriz, Dios mío, vuelvo a sentir la vida, vuelvo a sentir mi vida...gracias, gracias Beatriz, muchas gracias.

Armando se acerca a Beatriz y la besa, ella se separa y le dice...

B- No, doctor, por favor...

A- Beatriz, lo siento, lo siento pero no puedo evitarlo, de verdad...

Armando la besa nuevamente y Betty vuelve a separarse de él...

B- No, doctor, por favor, no...

A- ¿Qué pasa, Beatriz? Yo la deseo, la deseo mucho. ¿Acaso usted no me desea?

B- Si doctor, demasiado.

A- ¿Entonces que esperamos? Dígame... ¿Qué esperamos? ¿Qué le pasa?

B- Doctor, no va a pasar nada, pero por favor abráceme, déme un abrazo.

Ambos se funden en un intenso abrazo.

A- Beatriz, yo...yo siento este abrazo como...como eso abrazos de despedida, siento este abrazo como cuando uno va al aeropuerto y se despide de la persona a la que ama y, y que sabe que jamás la va a volver a ver.

B- Se parece mucho, doctor...
El sonido del teléfono los interrumpe...

A- Maldita sea, el teléfono.

Betty y Armando se separan y ella atiende el teléfono.

B- Presidencia.

W- Doctora, ¿usted pidió un taxi?

B- Sí, sí, ya bajo, gracias, Wilson.

A- ¿Cómo así que ya baja, quién vino por usted?

B- Un taxi que pedí doctor...

A- ¿Un taxi? ¿Para dónde va?

B- Para mi casa.

A- No, no Beatriz. Yo la llevo a su casa, yo la llevo a su casa. Yo necesito estar con usted hoy. Beatriz yo quiero que vayamos a algún lugar donde podamos estar solos, yo necesito pasar la noche entera con usted.

B- Doctor eso va a ser muy difícil para usted, lo de la junta va a estar muy duro. Además hay que llegar mañana temprano para organizar todo y usted tiene que irse mejor a su casa a descansar, a estudiar esto y mañana tiene que estar muy lúcido doctor. Por favor, vaya y estudie el balance.

A- No, ni me lo entregue porque es que yo ya no tengo tiempo de empaparme del contenido de ese balance, Beatriz. La única persona que puede exponer ese balance mañana es usted y lo sabe. ¿Dónde está el balance real?

B- Es este doctor, lo tengo guardado... En todo caso voy a sacarle copias al balance maquillado para meterlas en las carpetas. Bueno doctor, que pase buena noche, hasta mañana...

Betty se retira y Armando la detiene tomándola del brazo...

A- Usted no se puede ir sin darme un último beso...

B- Doctor por favor, usted sabe que a mí no me gustan estas cosas en la oficina.

A- Y usted sabe que a mí me encantan. Beatriz... Betty, escúcheme aunque sea un momento, yo...yo volví a ser feliz hoy, hace mucho tiempo que no lo era, y hoy por fin veo un poco de luz al final del túnel. Beatriz, con este balance mañana vamos a salir delante de esa maldita junta directiva, con la colección vamos a poder pagar todas nuestras deudas y estabilizar todo el sistema financiero de EcoModa... Beatriz, todo comenzó a mejorar, mejorar muchísimo. Mañana, Marcela Valencia va a salir de mi vida y el camino se va a abrir para nosotros dos...estamos a muy poco, a muy poco tiempo de lograrlo, Beatriz...

B- Sí, claro que sí, hasta mañana...

Armando detiene nuevamente a Betty

A- Beatriz, dígame si me ama, ¿sí? Necesito saber si me ama, para mí es muy importante saberlo... ¿Me ama?

B- Si doctor, yo nunca he dejado de amarlo...

Armando se acerca y la besa y le dice...

A- Yo la amo más que nunca, yo la amo mas que a mi vida.

Beatriz se retira y Armando se queda en la oficina de Beatriz, él se sienta en la silla de Betty y dice...

A- Armando Mendoza, vas a tener que aceptarlo, vas a tener que aceptar que estas enamorado por primera vez en tu vida... Y, te enamoraste de Beatriz Pinzón Solano... No sé como, Dios mío, no sé como, pero me enamore, me enamore más que nunca... 

“Receba um grande abraço”

Do "testamento" de Armando...
"Reciba un gran abrazo...”



Hoje, pela primeira vez, senti o quanto Armando desejava que Betty, realmente, RECEBESSE aquele abraço!

Marcela sentia-se aliviada por imaginar que, após o lançamento e a junta diretiva, Armando estaria livre de muitos pesos. Não imaginava, porém, que o maior peso do qual Armando pretendia se livrar seria... justamente ela!



Armando sentia angústia pelas decisões que precisava tomar: romper o seu compromisso de matrimônio com Marcela e... assumir, ou não, o seu romance com Betty. Pela primeira vez depois de muito tempo, porém, Armando voltara a sentir felicidade! Armando sentira “de volta a sua vida”!

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Nas cenas do “antes” e do “depois” do lançamento que precedeu a fatídica junta diretiva (para mim, as mais lindas de toda a novela!), somente Betty sabia que... aqueles contatos físicos (carícias!), e aquele beijo, eram a sua... despedida de Armando... para sempre!!!!

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Anexo à renúncia de Armando:

“... Me habría encantado continuar a su lado acompañándola en su gestión, pero por motivos ampliamente discutidos entre los dos, lo mejor para EcoModa y para usted, es que siga su camino sola. De todo le deseo mucha suerte y que continue su brillante gestión, con los éxitos que ha obtenido. Reciba un gran abrazo...”

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Eu, nesta cena, sempre vi (e ouvi) a Betty lendo para as suas amigas aquelas que (e eu nunca tinha me atentado para esse detalhe!), seriam para ela as últimas palavras de Armando!

Hoje, pela primeira vez, imaginei o Armando escrevendo para Betty estas palavras! A mágoa que ele sentia em seu coração!, já consciente de mal que causara à quem... só queria bem! A tristeza de imaginar que, talvez, jamais voltasse a ver a ... pessoa que ele tanto amava!!!!

Hoje, pela primeira vez, imaginei tudo o que ele tanto quis dizer à Betty e não teve a oportunidade (e, talvez, jamais a tivesse!).

Hoje imaginei  tudo o que ele queria lhe explicar! Imaginei o pedido de perdão! Imaginei o quanto ele queria e precisava do perdão!

Em poucas linhas Armando conseguiu apenas o essencial: externar o seu desejo de que Betty seguisse sendo bem sucedida na empresa e o de que ela... fosse feliz!

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Hoje... imaginei esse abraço! Hoje, pela primeira vez, não vi a Betty lendo a carta de Armando para suas amigas, mas sim, o Armando lhe escrevendo cada palavra!

Hoje imaginei o quanto ele queria, ao invés de só expressar numa folha de papel a sua vontade, dar lhe pessoalmente aquele abraço! “Um abraço de despedida, no aeroporto, quando se sabe que jamais se voltará a ver a pessoa amada” (sentido conscientemente só por Betty horas antes da junta fatídica!)

Hoje, pela primeira vez, percebi o quanto Armando queria poder abraçar, nem que fosse pela última vez, a mulher que (e ele já descobrira isso!), iria amar para sempre! Hoje, pela primeira vez, senti o quanto Armando desejava que Betty, realmente, RECEBESSE aquele abraço!

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“Armando Mendoza, vas a tener que aceptarlo, vas a tener que aceptar que estas enamorado por primera vez en tu vida... Y, te enamoraste de Beatriz Pinzón Solano... No sé como, Dios mío, no sé como, pero me enamore, me enamore más que nunca”

Ciúmes, malditos ciúmes...

Armando segue Betty e Nicolas, que a leva para a casa. Betty continua se comportando como se tivesse um relacionamento amoroso com seu amigo. Betty se despede de Nicolas (com beijinho e tudo!!!!), e este segue para o encontro com a Oxigenada. Armando se aproxima bruscamente, cantando o pneu do carro:

Armando – Beatriz Pinzón!

Betty – [coma uma cara de surpresa muito das fingidas!!!] Don Armando, o que faz aquí?

A – Vim comprovar, com meus próprios olhos, o que estava suspeitando faz tempo, Beatriz!

B – O que foi que viu, Don Armando?

A – Tudo!!! Eu vi tudo, maldita seja! Eu os vi no “Le Noir”, tomando vinho, felizes! Tomaram-se as mãos!!, Beatriz. Estavam se acariciando!!, maldita seja! Estavam se abraçando! Por que me faz isso?!, por que a mim!?

B – Por favor, acalme-se, Dr., vai despertar a todo mundo!

A – Não, claro, acalme-se ,Dr., acalme-se! Verdade, Beatriz?, Por que me faz isso? Você não se dá conta? Eu todo o tempo tenho dito que suspeito que há algo entre vocês, que algo está passando entre vocês dois e você me nega todo o tempo. Está me deixando louco! Estou desesperando!, entende? Eu estou me desesperando! Por que nega se eu o vi??!!

B – Um momento, Dr., mas o que eu estou fazendo?

A – Como o que está fazendo? Estava se abraçando com esse tipo!, estavam se abraçando, tomaram-se as mãos! Acariciaram-se! Beijaram-se!!!!

B – Mas não na boca!

A – Não, não, eu não sei onde foram os beijos, mas... beijaram-se!!!!

B – Dr., não foram na boca, foram na bochecha! Ademais, deixe-me dizer-lhe algo: Nicolas e eu nos conhecemos muito bem, somos muito bons amigos.

A – Não, mas é claro que me dei conta que são boníssimos amigos!!!!!

B – Nos conhecemos desde que éramos crianças!

A – Não, e que casualidade!, como se conhecem bem! Não é?, certo?

B – Dr., como você bem  escutou na oficina, nós dois tivemos uma discussão...

A – Mas, por Deus!, você acredita que eu sou um bobo, ou o quê? Claro que me dei conta que tiveram uma discussão! Por quê?, diga-me, por quê? Por uma mulher! Por uma oxigenada! Estava ciumentíssima!, diga-me que não, vai!

B – Não, não, não! Um momento, Dr.. Eu estava preocupada porque pensei que havia dinheiro de TerraModa envolvida, mas não era assim! Já está tudo esclarecido! Quando quiser eu mostro o estado das contas da empresa!

A – Não, não, eu imagino que o estado das contas da TerraModa deve estar em excelentes mãos, nas mãos de Nicolas Mora!. E, é claro, hoje foram esclarecer tudo entre abraços, e carícias... e beijos!!!!

B - Dr., nos reconciliamos. Nossa amizade estava em perigo. E, sim, como nos queremos tanto, temo-nos tanta confiança, pois, tomamo-nos as mãos abraçamos-nos, beijamo-nos, mas na bochecha!!!

A – Sim, claro, Beatriz, que amigos tão ternos, não? Tão carinhosos! O que me rompeu o coração foi a ternura que tinham!!!

B – Ouça uma coisa, Dr., a você não parece que fica muito mal essas reclamações?, vir aqui em minha casa ver o que é que estou fazendo com meu amigo, quando você passa beijando-se com dona Marcela na oficina?, quando você passa em seu apartamento , fica quase todas as noites com ela, e não precisamente a dormir!! Assim que, de verdade, Dr.,, fica-lhe muito mal suas reclamações! Até amanhã!

A – Eu não voltei a tocar a Marcela! Beatriz, desde que você e eu estivemos juntos, eu não voltei a tocar a Marcela nem a nenhuma outra mulher. E esse é meu problema, esse é meu problema. É o que está me consumindo por dentro. Só posso estar com você. [isso mesmo!, sem pontos de exclamação! Confissões não tem esses tons!!!]

B – Não tem porque dar-me satisfações dizendo-me isso, Dr.. Conheço muito bem as condições desta relação. Não me diga mentiras. Agora, se me permite, tenho que entrar porque tenho que me deitar. Tenho que madrugar para terminar o balanço amanhã.

A – Não, venha cá! Eu te juro! Eu te juro, pelo mais sagrado na minha vida, que é você [ai, como eu adoooro iiiiisso !!!!!!!!!!!]  que é verdade o que eu estou dizendo!

B – Sim, claro, Dr.. Até amanhã!

A – Beatriz!, venha para cá, por favor!, sim?!

B – Dr., por favor, acalme-se, você está muito tomado...

A – Sim, mas eu quero um beijo seu...

B – Não, não...

Betty não deixa que Armando a beije, e ele segue tentando abraça-la e beija-la. Don Hermes escuta a discussão e sai:

Don Hermes: O que é que está se passando? Bom, o que é que está se passando aqui?

B – Nada, nada, papai. Estava falando com Don Armando. Ele já se vai...

H – Ah!, você é o que estava gritando como um desalmado?

A – Não, estava cantando...

B – Não, estávamos discutindo por uma tolice!

H – Ah, sim?

B – Até amanhã, dom Armando...

A – Até amanhã, Betty. Até amanhã, don Hermes. Com licença...

H – Dr. Mendoza, permita-me dizer-lhe que não gosto nada de sua forma de cantar.

A – Eu canto horrível, eu sei, Perdão, don Hermes...

H – Ele estava gritando com você!, não é certo, filha?Eu te tenho dito que não permito que ninguém venha a gritar com você!!!

B – Não, não estava gritando comigo papai. Que vá bem, Dr,!

A – Até amanhã, Beatriz.

Betty e don Hermes entram na casa, enquanto Armando, já em seu carro, fala desesperado, para si mesmo:

A – O que está me passando, meu Deus? Estou como um louco! Eu gritei muito com ela!! O que está me passando?

Dois "maldita seja" e um "pelo mais sagrado na minha vida, que é você!" Só o nosso Belobobo, mesmo, para usar essa combinação numa única declaração de amor!!! 28623